El arte tiene el poder de transformar, de sanar, de dar color allí donde más se necesita. He tenido el privilegio de compartir un taller de creatividad con materiales reciclados en la planta de pediatría del Hospital La Fe, donde los auténticos artistas fueron los niños hospitalizados.
Foto: Hospital La Fe
Con sus manos, su imaginación y materiales tan sencillos como bolsas de plástico, crearon flores llenas de vida y composiciones que emocionan. Cada obra es un reflejo de su capacidad para transformar lo cotidiano en belleza, de su fuerza para crear incluso en circunstancias difíciles.
Las obras, efímeras y llenas de significado, fueron fotografiadas y forman ahora parte de una galería virtual. Un homenaje a su creatividad y a su luz.
SOBRE EL TALLER
El contexto hospitalario se convierte en una herramienta esencial para estimular la imaginación, la expresión y el bienestar emocional de los niños. “Donde florece la creatividad” nace como una propuesta artística y educativa en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente.
Fue una experiencia artística completa adaptada a todas las edades y habilidades. En un ambiente seguro, alegre y cuidadosamente preparado, los niños transformaron bolsas de plástico recicladas en flores llenas de color y expresión. Los participantes desarrollaron composiciones únicas que pudieron firmar como artistas y fotografiar antes de desmontarlas o llevárselas consigo.
Las creaciones, hechas con flores imantadas sobre lienzos también imantados, permitieron combinar libertad artística con sostenibilidad. Al finalizar, cada composición fue fotografiada y enmarcada digitalmente con el nombre del pequeño artista, creando una obra efímera que queda como recuerdo imborrable.
OBJETIVOS DE LA EXPOSICIÓN
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Promover la creatividad y la expresión artística en el entorno hospitalario.
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Celebrar el talento y la sensibilidad de los niños hospitalizados.
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Reivindicar el valor del reciclaje como herramienta creativa y educativa.
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Generar un impacto emocional positivo en los pacientes pediátricos y sus familias.
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Visibilizar el trabajo del aula hospitalaria y la importancia de actividades integradoras.
UNA EXPOSICIÓN VIVA Y PARTICIPATIVA
Las obras incluidas en esta galería son efímeras, pero su impacto es duradero. Cada niño pudo llevarse una flor a casa o a su habitación, y cada imagen capturada ha pasado a formar parte de esta colección virtual. El hecho de que las composiciones sean desmontables permite repetir el proceso creativo cuantas veces se desee, convirtiendo cada sesión en una nueva oportunidad para florecer.
AGRADECIMIENTOS
Este proyecto ha sido posible gracias a la colaboración del aula hospitalaria del Hospital La Fe, especialmente a las profesoras Paz y Lucía, al equipo de Servicios Generales, a mis amigos: Bea, Carlos y M. Alejandra y, por supuesto, a los niños y niñas que con sus manos han llenado de color y esperanza un espacio donde florece el arte.
